La producción de Volkswagen decayó en un 10.9 por ciento de enero a agosto de este año en comparación con el mismo periodo del 2017; por octavo mes consecutivo sus niveles de fabricación disminuyeron, al igual que sus ventas.

De acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, en los primeros ocho meses de este año la planta de Cuautlancingo ensambló 287 mil 663 unidades, cifra menor a las 322 mil 831 del año pasado.

Pese a esta situación, la armadora poblana se ubicó como la cuarta de mayor producción en el país, pues el primer lugar lo ostenta General Motors con 572 mil 453, seguido por Nissan con 487 mil 318 y por FCA México con 434 mil 904 vehículos.

En el comparativo mensual de agosto la armadora poblana también tuvo una baja, pues ensambló 43 mil 499 automóviles, mientras que en agosto del año pasado fabricó 46 mil 970, es decir, una caída de 7.4 por ciento.

A mediados de dicho mes, la empresa anunció que disminuirá los niveles de producción en un 16 por ciento, como consecuencia de la inestabilidad del mercado mundial; además, se inició con el despido de 500 trabajadores eventuales.

Cabe recordar que las ventas de Volkswagen de enero a agosto de este año decayeron en un 18.4 por ciento al pasar de 127 mil 766 a 100 mil 408 unidades.

Producción de Audi incrementa

La producción en la planta de Audi en San José Chiapa aumentó en un 35.1 por ciento en el periodo trascurrido entre enero y agosto de este año en relación al mismo lapso del 2017, ya que su fabricación incrementó de 91 mil 623 a 123 mil 815 vehículos.        

En cuanto al reporte mensual, presentó una baja al pasar de 16 mil 300 en agosto del 2017 a 15 mil 160 para el mismo mes de este año, lo que significó una disminución del siete por ciento.

La marca de los cuatro aros también realizó un paro técnico durante el mes de agosto, el cual duró tres días. A diferencia de Volkswagen, Audi suspendió sus actividades debido a la modificación de sus líneas de producción.

Ambas armadoras realizaron paros técnicos durante agosto, pero en el caso de Volkswagen la suspensión en la producción fue de una semana, mientras que en Audi duró tres días.