La iniciativa con la cual Morena buscaba acabar con “el alarmante y excesivo abuso de comisiones bancarias” provocó que la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) registrara la mayor caída en siete años y que el peso se depreciara, además de que puso en alerta tanto al sector financiero como a la iniciativa privada.

Después de que por la mañana la bancada de Morena en el Senado presentó en tribuna reformas a las leyes de Transparencia y Ordenamiento de los Servicios Financieros y a la de Instituciones de Crédito para terminar con una quincena de comisiones que cobra la banca mexicana y que representan la tercera parte de sus ingresos —en 2017 ascendieron a 108 mil millones de pesos—, el propio coordinador Ricardo Monreal abrió un compás de espera y afirmó que no se aprobará de manera apresurada tras recibir a representantes de bancos ingleses y españoles, que propusieron trabajar de manera conjunta y revisar el cobro que hacen en otros países, comparados con los aplicados en México.

También el futuro secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, salió al quite y anunció que Andrés Manuel López Obrador los instruyó a reunirse con los líderes de diputados y del Senado para “analizar los impactos tanto en las finanzas públicas como en la estabilidad del sector financiero” de las recientes iniciativas de Morena.

Urzúa anunció que después de que el Presidente electo lo convocara a una reunión con Monreal, acordaron estas reuniones para analizar las iniciativas “de carácter fiscal y financiero” presentadas como parte del proyecto del próximo gobierno federal.

Recalcó que el equipo de transición mantendrá énfasis en tres premisas fundamentales: respeto irrestricto a la autonomía del Banco de México, estabilidad macroeconómica y financiera, y manejo responsable de las finanzas públicas.

Fuente: Milenio