Pese a todo lo que estamos presenciando, Puebla sigue siendo una isla en que los niveles de delincuencia están por debajo de estados vecinos y son muy diferentes a entidades del norte del país.

Evidentemente los efectos Facundo, huachicol y Carrancá afectaron de manera grave a Puebla. Y el costo político y social de esos factores ya causó una crisis el primero de julio.

El próximo gobierno estatal deberá tener como prioridad y eje central la reestructuración de la Secretaría de Seguridad Pública y la Fiscalía General del Estado. En esos terrenos simplemente no pueden darse consentimientos, ni consideraciones.

Aquí la próxima titular de la gubernatura deberá exigir el restablecimiento del orden y la eficiencia en esas dependencias. El estado de Puebla simplemente ya no aguantaría otro periodo con la presencia de Carrancá.

En la ciudad de Puebla el escenario es semejante. La dupla que formaron el alcalde Luis Banck y Manuel Alonso pudo contener -ése es el término: contener-, la ola de delincuencia que por momentos amenazó con desbordarse.

En estas semanas recientes grupos criminales, células armadas se envían mensajes en video, se amenazan y advierten con acciones cruentas. Pero debe enfatizarse que pese a esas intimidaciones el crimen organizado no ha hecho de Puebla uno de sus feudos. En la ciudad ese nivel de delincuencia ha sido contenido. Subrayamos no eliminado, ni erradicado. Por el momento sólo ha sido contenido.

Y la principal tarea de Claudia Rivera Vivanco, alcaldesa electa, será la de continuar en ese tenor.

Aunque la próxima funcionaria no tiene una experiencia directa en el área de Seguridad Pública, sí tiene todas las posibilidades de conformar un Consejo Consultivo en la materia que le permita tener una política, una estrategia eficiente sobre el punto.

En horas recientes Rivera presentó a Javier Palou como jefe de la Oficina de la presidencia municipal. Es conveniente y prioritario que en el mismo sentido se haga el anuncio formal del próximo responsable en el área de Seguridad Pública. La alcaldesa electa sostiene un discurso que versa sobre una política incluyente. En ese terreno es donde esa visión debe privilegiarse.

Por el bien de Puebla es lo que se espera.

Regionales.  

Coyomeapan: violencia desbordada en la Sierra Negra

Bien haría la Fiscalía General del Estado en enviar una comisión especial a investigar la violencia que se ha desatado en las últimas horas en Coyomeapan.

El escenario político es inédito e inaudito. El priista David Celestino Rosas fue presidente municipal de la comunidad de 2011 a 2014. Posteriormente tocó turno a su hermana Araceli Celestino, quien tomó esa responsabilidad de 2014 al presente 2018. Y ahora regresa nuevamente David, pero bajo las siglas del PAN.

En días recientes se suscitó un hecho violento. Los pobladores hablan de que la alcaldesa en funciones tiene un grupo de por lo menos 25 pistoleros que son ajenos al cuerpo de policía. Esos sujetos abrieron fuego contra pobladores y hay lesionados de gravedad.

El activista José Luis Leyva Machuca, titular del ‘Movimiento de Autogestión Social, Campesino, Indígena y Popular, MASCIP’ presentó una lista con nombres de personas que fueron asesinadas en años recientes, presuntamente por motivos políticos.

Si la Fiscalía no actúa, la próxima legislatura local deberá instalar una comisión para investigar esos crímenes que tienen todos los rasgos de venganzas políticas.

Ojalá lo hagan.

Como siempre quedo a sus órdenes en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., sin mx.