El Congreso local poblano, donde durante décadas fue mayoría absoluta, sólo pudo ganar una diputación, la de Acatlán de Osorio, Distrito local 23. Todos los demás tendrán: Morena, 16 representantes y 9 la alianza conformada por el PAN, PRD, Movimiento Ciudadano, PSI, Compromiso por Puebla y el de Izúcar de Matamoros, con una coalición que incluyó al Partido Nueva Alianza.
De las 15 diputaciones federales que corresponden a Puebla, Morena ganó 14 y sólo una fue para la alianza encabezada por el PAN y PRD, la de Zacatlán, y las dos senadurías de mayoría fueron obtenidas por Alejandro Armenta Mier y Nancy de la Sierra, también de Morena.
Las presidencias de los principales municipios del estado, entre ellas la de Puebla capital, también quedaron en manos del partido del ahora presidente electo. En las de la Sierra Norte prevaleció la alianza con Puebla al Frente, conformada por el PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, además del PSI y Compromiso por Puebla; en la región mixteca es donde todavía se votó en algunos de los municipios, por el PRI, como Chietla, donde el ganador fue el priista Olaf Ponce, Chiautla de Tapia, donde ganó Juan Domínguez Espinosa y en Jolalpan, donde la planilla priista obtuvo 2 mil 677 votos, contra mil 857.
En Izúcar de Matamoros ganó la planilla encabezada por el profesor Melitón Lezama, con más de 10 mil votos, contra 6 mil 270 obtenidos por la planilla del PRI encabezada por Lorenzo Suárez y la de la alianza capitaneada por el PAN, que encabezó la señora María del Carmen Lezama, que obtuvo 3 mil 861.
Hay fuertes inconformidades en Tepeojuma, donde exigen que se repita el proceso, pues se detectaron boletas falsas, urnas llevadas indebidamente a Cacaloxúchitl; en Tilapa, donde hay un empate técnico entre PRI y la alianza conformada por el PAN, PRD y MC.
En Atlixco ganó José Guillermo Velásquez, de Morena, que tuvo un triunfo muy apretado sobre Juan Antonio Villar.
En San Andrés Cholula, el municipio de más explosivo crecimiento de los últimos años, pues en su territorio surgió Angelópolis, zona residencial y comercial de lujo, estuvo varios trienios en manos del Partido Acción Nacional y el predominio panista terminó el domingo, al obtener Morena la votación mayoritaria para gobernar el municipio.
Muchos políticos consideran que la caída del PRI, si no es definitiva, tampoco será fácil salir de ella. Cuando perdió la Presidencia de la República a manos del PAN, bastaron dos sexenios para que la recuperara, pero los panistas no parecieron tener ni idea de lo que debían hacer y no hicieron nada. Fue una simple alternancia en el poder, que sólo sirvió para demostrar que a los del PAN les falta oficio político y que pueden ser tan corruptos, como los priistas y se les despertó la ambición para seguir aspirando al poder total de este país.
Lo de ahora es otra cosa: es un cambio de régimen en el que es muy posible que haya cambio de modelo económico y que de ello se deriven otros más, en política social y en política-política. Si eso se hace, los políticos de la vieja escuela ya no tendrán cabida en lo que fue en muchos casos la actividad de su vida.
Ayer a eso de las 4:00 de la tarde, grupos armados se presentaron como policías en un tianguis que semanariamente se forma en Angelópolis, sobre el Bulevar Atlixco, pues se dice que ahí tenían las urnas robadas en diferentes casillas el pasado domingo primero de julio, día de las elecciones.
Hubo violencia y varias personas fueron golpeadas. Se dice que fueron extraídos numerosos documentos referentes a las pasadas elecciones, pues la casa fue identificada como cuartel de personal de la campaña de la coalición Por Puebla de Frente.
Según los rumores que corrieron inmediatamente después del borlote, grupos de Morena buscan cómo demostrar que se cometió fraude en la elección para gobernador de Puebla.
Hay varios lesionados, entre ellos un licenciado Blancarte, que parece ser miembro del personal de esas oficinas con un rango importante.