La crisis interna del partido, afirman, se inició hace casi diez años, cuando se acordó la alianza con el PAN para apoyar la candidatura de Rafael Moreno Valle a la gubernatura de Puebla.

 

        -¿Bueno, y quien acordó esa alianza? Preguntamos.

 

        -Los Chuchos de la corriente Nueva Izquierda, y Héctor Bautista de la Corriente Alternativa Democrática Nacional.

 

          Nos dicen que el declive que se inicia en el PRD no sólo es en que muchos militantes abandonan sus filas, sino que, además, el partido pierde su identidad ideológica y se deteriora gravemente su estructura y organización.

 

          Rubén Moreno y Guadalupe Sánchez Jiménez ‘El Lupillo’ han sido fieles militantes del PRD desde su época de estudiantes.

 

          Aunque nunca han ocupado un puesto de elección popular ni un puesto público, han sido fieles a su causa y hasta llegan a soñar en la recuperación de su partido.

 

          Sin embargo, no están tan alejados de la realidad cuando afirman que el control del Partido de la Revolución Democrática en Puebla lo ejerce el exgobernador Moreno Valle, y que su organización política puede desaparecer si continúa aliada con el PAN, tanto en la entidad poblana como en el resto del país.

 

         Incluso reconocen que esa alianza ha dañado también al PAN, pues muchos de los conservadores afiliados al partido de la derecha lo han abandonado en manos de los morenovallistas y su comité nacional no dice nada al respecto, por el contrario, lo acaban de designar coordinador de la bancada del PAN en el Senado de la República.

 

         -Como quien dice, el PRD ya está perdido y no hay esperanza de salvación.

 

         -No, sí hay esperanza, pero para eso hay que trabajar mucho: hay que volver a reconstruir al partido; replantear su relación con la sociedad; darle espacio a las nuevas generaciones; retomar su compromiso y lo valores de izquierda y recobrar su identidad política y partidaria.

 

          -¿Ajá, y con quienes va a hacer eso, si ya todos los perredistas emigraron a Morena?

 

No, no todos han emigrado. Han abandonado las filas del partido, sí, muchos buenos cuadros como Jorge Otón Chávez Palma, Eduardo Fuentes de la Fuente, Gaudencio Ruíz García, Jorge Méndez, Rosa Márquez y muchos más, pero hemos quedado muchos que podemos emprender el trabajo que sea necesario, sobre un buen plan que permita la recuperación del partido.

 

                    Eso sí, advirtieron que debe abandonarse la idea de alianza con el PAN, que es el partido ideológicamente contrario al perredismo. Somos, expresaron, un partido de izquierda y estamos aliados con un partido de derecha.

 

               “No sólo se crea confusión en nuestras filas, sino se desorienta al ciudadano común”.

 

              -¿Y por qué creen que se negoció esa alianza?

 

Esas ya son palabras mayores. Ve tú a saber qué tipo de arreglos hicieron los grupos perredistas que hicieron la negociación...

 

 -Porque hasta donde yo sé, ni siquiera hubo algún puesto importante para perredistas poblanos y al ex secretario general de gobierno, Luis Maldonado Venegas, que era del partido Movimiento Ciudadano, lo hicieron perredista y candidato a diputado plurinominal y a punto estuvieron de convertirlo en dirigente nacional...

 

     -Sí, eso es cierto, pero las protestas de la militancia de a pié de varios estados, tanto perredistas como panistas, lo impidieron.

 

¿Entonces hubo el peligro de perder al partido?

 

 El peligro todavía existe. Te estamos diciendo que Moreno Valle sigue controlando al PRD en Puebla y no sólo eso, hemos estado observando que si los panistas también se descuidan, es posible que el morenovallismo se adueñe del PAN, como ya lo hizo en la entidad.

 

          Toma en cuenta que los partidos políticos de nuestro país están viviendo una crisis existencial. Lo han perdido todo, identidad ideológica, organización, estructura, gran parte de su militancia y económicamente están quebrados: le deben a sus proveedores y elevadas multas a las autoridades federales.

 

          Además, sus percepciones económicas se han derrumbado a raíz de su derrota en las urnas. ¿Quién o quiénes están en posibilidad de financiar a esas organizaciones partidistas para sacarlas adelante? ¿Quienes han hecho sus ahorritos a costa del erario público, para afrontar los enormes gastos que requiere un partido político?

 

             -Bueno, ustedes se van a quedar en el PRD para tratar de salvarlo o ustedes también se van a ir a la primera llamada.

 

             -Si ese fuera nuestro propósito ya lo hubiéramos hecho, pero no, aquí estamos. Ya sabemos que van a decir que somos unos babosos que no nos damos cuenta de la realidad, pero conocemos al partido por dentro y todavía hay mucho que salvar y muchos dispuestos a participar en esa lucha.