Los alaridos en aquellos recintos se tornaban obscuros, por ocasiones, la algarabía se hacia con la corona de los más impasibles. Y así transcurría entre evento y evento un discurso extraño en él, todos juraban que ‘un tal Rafael’ y los adjetivos más funestos serían las armas del mesías para ensalzar al príncipe ‘rengador’. Nadie pensó que Andrés cambiaría su discurso radicalmente, de un ¡cállate chachalaca! mutó a un ¡ahorita no es momento, poco a poquito! Parece ser que Andrés ahora sí está dispuesto a ganar.
Este fin de semana Andrés Manuel visitó municipios de Puebla, las multitudes se hicieron presentes, los indeseables de Cholula saludaban muy efusivos a un pueblo lastimado por la corrupción reinante en las oficinas del Ayuntamiento de José Juan Espinosa. Operadores del PRI, otros más del PAN se reunían para aletearse la espalda y gritar “¡Líder! ¿Cómo te va? ¿También ya te trepaste al barco de la esperanza de México?” y es que, aunque lo digan entre risotadas sus ojos de hienas responden a su realidad: son unos trepadores de circo que antes funcionaban al régimen y ahora sirven al terror de quedarse fuera del erario.
Andrés Manuel dejó muy en claro que su maquinaria esta muy aceitada, el poder de convocatoria que tiene es contundente y la forma de arrebatar adeptos a través de la ideología es un elemento fundamental en su catalágo de virtudes.
Si quedaba alguna duda de todas estas afirmaciones basta con revisar las imágenes del evento en Zacapoaxtla, un municipio de antaña tradición priista y que hace menos de siete años se volcó al Morenovallismo, ese municipio dejó muy en claro que está molesto con la soberbia de Rafael y Martha Erika, que esta alejado del contexto priísta actual y es que no es para menos el partidazo no aprende de sus errores, sigue con la unción de candidatos a través del dedazo, sigue sin escuchar a su militancia y por si fuera poco el olor de acuerdos obscuros en los municipios clave se vuelve insoportable. En AN las cosas no son diferentes, el Frente se encuentra fragmentado a nivel nacional y eso está mermando en la política local-Zacapoaxtla es la muestra- la soberbia de los Moreno Valle es evidente, Martha Erika ha querido adoptar un papel de víctima de violencia de género que resulta vomitivo y risible. En fin, los partidos se encuentran perdidos en la ignominia y en el banquete del absurdo.
Mientras tanto López Obrador alista todas sus piezas, sabe que la batalla en Puebla será una carnicería, sin embargo, va de la mano con generales experimentados en movilizaciones, operaciones y acuerdos. Si los generales en Puebla requieren un empujón tienen la imagen del mesías que los salvará y por supuesto una ideología combativa en contra de dos partidos que se encuentran en el poder. Siempre será mejor matar dos pájaros de un tiro.