En el marco del Día Internacional de la Mujer, lejos de las ‘chorradas’ de huelgas que promueven algunas feministas que desean emular las bochornosas escenas ocurridas en España, nadie en Puebla sabe el estado real de la violencia de género porque es imposible confiar en las estadísticas de la incidencia delictiva. El manoseo es total y absoluto, y precisamente Puebla es la prueba. De esto es lo que tendrían que estar hablando las feministas.
Según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), durante 2017 en Puebla ocurrieron sólo 27 feminicidios, pese a que el fiscal Víctor Carrancá, en su comparecencia ante el Congreso local, reconoció 77 casos. Los registros hemerográficos realizados por los medios de comunicación, sin embargo, contamos 102.
¿Qué va de 27 a 77 a 102 casos de feminicidio? La distancia es sideral. ¿Y a qué se atribuye la diferencia entre las cifras del SESNSP y las de la Fiscalía poblana? Pues a una confusión, según declaró el mismo Carrancá. Una confusión que no parece interesarle a nadie aclarar, porque a este día de marzo en el portal del SESNSP continúa la cifra de 27 feminicidios. La FGE no ha promovido una corrección.
De acuerdo con Carrancá, los feminicidios “son un fenómeno complejo” que es difícil de analizar debido a las “incongruencias” que presentan los reportes nacionales respecto a las cifras recabadas a nivel estatal, según respondió a la diputada Beauregard que lo cuestionó por el tema en el Congreso local.
Según el SESNSP, en México ocurrieron 678 feminicidios en 2017. Pero, si como ocurrió con el caso poblano que muestra contradicciones con la FGE, ¿cuántos feminicidios realmente se cometieron en México en ese año?
Las cifras oficiales son de risa. En la CDMX sólo se abrieron 37 carpetas de investigación; en Coahuila 9; en Chiapas 29; en Chihuahua -remember las muertas de Juárez- 11; Jalisco 27; Hidalgo 20; en Estado de México -donde sí hay Alerta de Género- 64; en Morelos 27; en Nuevo León 43; en Oaxaca 58; en Sinaloa 82; en Sonora 32; en Tabasco 28; en Veracruz 79.
¿Por qué es importante limpiar las cifras oficiales? Si le creemos al SNSP con sus 27 casos de feminicidio, Puebla se encuentra en el lugar 9 del ranking nacional. El problema parece grave, pero no tanto. Si tomamos la cifra reconocida por Carrancá y la FGE de 77 casos, subimos al 3er lugar del ranking nacional. Pero si tomamos el recuento hemerográfico realizado por los medios, en realidad Puebla sería el estado con más feminicidios de todo el país.
Así de importante es limpiar las cifras: la diferencia de estar en el 9° lugar a convertirnos en el estado del país con más feminicidios. ¿Pero cómo sabemos que el SESNSP no se “equivocó de cifras con las demás entidades, y en México no ocurrieron 678 casos, sino muchísimos más que fácilmente pueden sobrepasar los dos o tres mil?
¿Y qué pasa con los años anteriores? En 2016 según el SESNSP ocurrieron en Puebla sólo 12 feminicidios, pero la FGE y Carrancá asumieron 27, mientras los registros hemerográficos de Periódico Central y Odesyr tienen 81 casos. Vuelve a ocurrir el mismo fenómeno: con las cifras del SESNSP Puebla se encuentra abajo del Top Ten nacional; con los 27 casos de FGE se ubica en los cinco primeros lugares, y con los datos hemerográficos nuevamente Puebla es el estado con mayor número de feminicidios en todo el país.
La misma tendencia muestra 2015. Según el SESNSP se reconocen oficialmente 6 feminicidios, mientras que la FGE tiene en sus informes 30 casos. Los medios de comunicación dimos cuenta ese año de 67. Con el primer dato ocupamos el sitio 13 del ranking nacional; con el de FGE nos ubicamos en el Top Five y con los 67 de los medios de comunicación…!otra vez somos el primer lugar nacional en feminicidios!
Ahora que las mujeres tienen el 50 por ciento de las candidaturas, una candidata a gobernadora, por lo menos dos a presidenta municipal de la capital, cinco candidatas al Senado, más de 40 a diputadas federales, quizá su primer compromiso debería ser ese: limpiar las cifras oficiales, obligar al SESNSP y la Fiscalía a contabilizar los datos para saber si Puebla es por tercer año consecutivo el lugar más peligroso para el género femenino: 2015, 2016 y 2017.
De esto deberían estar hablando todas las feministas de Puebla: los datos oficiales están manipulados y así nunca vamos a conocer la verdad. Pero no les interesa ni a las candidatas, ni a las organizaciones, ni a las gritonas: todo se les va en promover la estridencia y no los problemas reales. Muy feministas, pero esto huele a simulación.