Tras la designación de Francisco Daniel Quitl Murillo como nuevo Secretario de Seguridad Pública en el municipio de Ocoyucan, comenzaron los despidos de los elementos del cuerpo policiaco por negarse a prácticas no éticas y que lejos de combatir el crimen lo fomenta.

El caso principal es el de Máximo Ocotl Tonacatl, quien durante la pasada administración fungía como director de Seguridad Pública pero fue despedido por negarse a buscar a los líderes del crimen como los distribuidores de combustible robado, drogas y bandas delincuenciales que operan en la zona para dialogar con ellos, según explicó.

“La encomienda que me dio el nuevo titular de Seguridad Pública es buscar a los líderes de los grupos que cometen estos delitos y llegar al acuerdo de que paguen una cuota a cambio de dejarlos operar en el municipio, me negué a hacerlo y eso me costó el trabajo”, relató el Máximo Ocotl.

De acuerdo con el afectado, el nuevo titular de Seguridad Pública asignado por el Concejo Municipal que encabeza Rodolfo Huerta lejos de querer combatir el crimen organizado manifiesta una estrategia de consentirlo y beneficiarse económicamente de ellos sin importar el riesgo que esto conlleva para la ciudadanía de las diferentes comunidades.