Cholula.- El ex secretario general del Concejo municipal electoral de San Andrés Cholula, Edgar Juárez, denuncia amenazas desde que se dio a conocer su participación en el fraude electoral a favor de la hoy alcaldesa de San Pedro Cholula, Karina Pérez Popoca.

En entrevista con el columnista Ricardo Morales, Juárez señala que fue invitado por el Instituto Estatal Electoral para participar en el proceso del pasado 1 de julio, luego de realizar los respectivos exámenes fue designado en el cargo dentro del Concejo municipal electoral.

El exfuncionario del IEE menciona que conoció a Oscar Mota Bazaldua como coordinador electoral adscrito a la dirección de organización electoral del IEE y que se desempeñaba como su asesor y jefe, pues era quien le resolvía dudas y a quien le rendía cuentas de su trabajo.

Juárez indica que llega con Mota Bazaldua por su amistad con un operador político de Pérez Popoca y que trabajó el en distrito 18 del IEE al que pertenece San Andrés Cholula, además de ser también concuño de Adán Xicale, representante de Morena.

Señala que desde el principio de la elección fue buscado por Xicale y por el actual regidor de San Andrés, Roberto Maxil, quien le envió mensajes de texto para concertar una reunión, invitación que se convirtió en hostigamiento.

Comentó que acudió a la cita a la Escuela Técnica número 32 a las 8:30 de la mañana, en el lugar fue conducido dos cuadras más adelante hasta la casa de Adán Xicale, donde la pidieron su apoyo durante las elecciones.

Ese momento no sabía sobre su implicación en un fraude electoral ya que sólo se comprometió a vigilar la elección y ser imparcial en su papel como secretario general del Concejo municipal electoral de San Andrés Cholula.

Aseguró que Adán Xicale en esa reunión le ofreció dinero, entre 20 mil y 10 mil pesos, mismo que devolvió en el acto, pues no aceptó el ofrecimiento a cambio de que lo apoyara pasadas las elecciones con trabajo.

Al día siguiente de la reunión Juárez recibió un mensaje donde Adán Xicale le indicaba que su solicitud había sido aceptada, refrendando el acuerdo pactado, a lo que se dedicó a trabajar en sus funciones ordinarias dentro del IEE.

En entrevista, comentó que el día de la elección llegaron 33 paquetes con anomalías, no llevaban las actas para el PREP, mismas que se tenían que ir a recuento. Fue hasta el día martes después de la elección, luego de la situación en el Hotel MM, donde gente de Morena irrumpió alegando que era una fábrica de votos, las consejeras y el presidente del distrito 18 se fueron del Concejo ante la amenaza de morena de hacer lo mismo en cada uno de los distritos.

Ante esta situación Juárez menciona que él permaneció junto a Mota Bazaldua realizando el trabajo tirado por los consejeros y el presidente mismo del distrito. Luego de cuatro días sin descanso, Mota Bazaldua le ofreció llevar el material electoral a la sede del IEE para terminar con el trabajo con ayuda de más funcionarios.

Juárez dice que confió en el ofrecimiento de Mota Bazaldua y siendo las 2 de la mañana de aquél día se quedaron de ver tres horas y media después, a las 5 y media. Cuando se volvieron a encontrar Mota Bazaldua regresó con lo poco que faltó por capturar de las actas de escrutinio y cómputo.

Recalca que durante esa noche, él nunca supo que el material electoral había sido trasladado a casa de campaña de Morena. No obstante aceptó que Karina Pérez Popoca estaba enterada de su acuerdo, pues el mismo Adán Xicale aceptó que la entonces candidata lo había aprobado.

Luego de la elección se presentó con Adán Xicale para cobrar el acuerdo, mismo que le señaló que él le había dejado el trabajo botado y que lo había metido en problemas políticos y legales, pues esa noche que dejó en manos de Mota el material electoral, Xicale le confesó que ese material electoral había ido a parar a casa de campaña de morena y no al IEE.

Juárez concluye que teme por su integridad física y responsabiliza a Adán Xicale, Roberto Maxil, Oscar Mota Bazaldua y a la misma Karina Pérez Popoca de lo que le pueda a pasar, pues ha recibido amenazas.

Recalcó que él se deslinda del presunto fraude, pues no supo que el material había sido trasladado a casa de campaña de Morena hasta pasadas las elecciones, cuando Xicale le confesó todo se consideró usado por los operadores políticos de Pérez Popoca y víctima del fraude.