Los ediles emanados de Morena en Zacapoaxtla y Huauchinango, Gustavo Vargas Cabrera y Ebodio Santos Alejo, respectivamente, a un mes de haber iniciado sus gobiernos han mostrado falta de capacidad, liderazgo y experiencia, ya que aún no logran satisfacer las necesidades y demandas de sus municipios.

Con excusas de no tener recursos y que el tema de la basura es por cuestiones políticas, el presidente municipal de Huauchinango dice que ya tiene un lugar destinado para el confinamiento de los desechos, pero no dice dónde está ubicado, luego de que decidió convertir el recinto ferial en basurero, tras haberles cerrado las puertas del relleno sanitario de Zacatlán, donde en los últimos cinco años depositaron la basura.

Promete que se construirá una planta recicladora de basura con la participación de otros municipios, pero no explica cómo lo harán ni de dónde obtendrán los recursos.

La proliferación del comercio ambulante y conflictos internos con trabajadores del Ayuntamiento son otros dos problemas que Vargas Cabrera dice que se resolverán de manera favorable, pero no da señales de intentarlo.

Gasta Zacapoaxtla en ex funcionarios

Por su parte, el presidente municipal de Zacapoaxtla, Ebodio Santos Alejo, no ha logrado destrabar el problema laboral que enfrenta con 27 ex funcionarios y regidores que dejó pensionados el ex presidente Guillermo Lobato Toral, ya que las actuales autoridades deben erogar más de 170 mil pesos para mantenerlos y hasta el momento el problema sigue latente.

Los argumentos que ambos alcaldes dan son que recibieron administraciones saqueadas por sus antecesores, con lo que justifican su falta de capacidad, para enfrentar los problemas de inseguridad, el comercio informal, la recolección de la basura y conflictos internos con la planta laboral.