Juan Galindo.- Aunque las autoridades locales citaron a los participantes del desfile Navideño 2018 a las 4 de la tarde, los contingentes comenzaron a movilizarse hasta las 5:30. Fue poco más de hora y media de retraso mientras que para algunos niños ya comenzaba a hacerse tediosa la espera.
El problema se generó por la falta de comunicación, se cerró el acceso principal hacia nuevo Necaxa. Una patrulla de la Policía Municipal se atravesó impidiendo el paso a todo tipo de vehículos a la altura del estadio 14 de diciembre.
Las filas llegaron por momentos hasta la caseta del “Garitón”, justo en la intersección con el entronque de la carretera federal México Tuxpan. Peor aún, nadie les informaba a los automovilistas qué estaba pasando. Algunos desesperados comenzaron a tocar el claxon como forma de protesta. Sin embargo la circulación estuvo totalmente detenida durante más de hora y media del desfile.
Una madre de familia que iba cuidando a su pequeño dijo “que se esperen, parece más bien espíritu Grinch”. Para los participantes fue un evento “bonito, que refuerza el espíritu navideño”, pero para los conductores que quedaron varados fue una total falta de responsabilidad y dijeron “el culpable no es Santa Claus, sino el alcalde Carlos Garrido por no establecer una adecuada estrategia de comunicación oportuna y una mejor logística para este evento que en cuestión de vialidad fue un caos”.
Salomón García
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