La presidenta municipal priista de Tlanepantla, Eloina Celis Téllez, es acusada por nepotismo, pues tiene familiares trabajando dentro del Ayuntamiento, entre ellos a su esposo, hija y sobrina. Pobladores molestos le dieron un ultimátum a la alcaldesa por falta de resultados y avances, reprueban que su esposo sea quien gobierne.

La alcaldesa, desde su campaña, incluyó a su esposo Guillermo Sánchez Pérez en su equipo de trabajo, aunque él no hizo campaña junto a ella, la gente no tenía conocimiento que tendría un cargo importante en caso de obtener el triunfo.

La sorpresa para muchos habitantes fue cuando se enteraron que la alcaldesa ya le había asignado a su esposo una regiduría en la comisión de Gobernación. La molestia aumentó cuando supieron que su hija Anayeli Sánchez Celis ocupó un cargo en el DIF municipal y su sobrina Carolina Sánchez Ramírez ocupa el cargo de Contralor Municipal.

Esposo es quien gobierna

Fuentes internas en el Ayuntamiento informaron a Diario CAMBIO que el esposo de la presidenta es quien toma las decisiones y no ella, incluyendo la nómina de los trabajadores. La presidenta municipal tiene un sueldo de 12 mil pesos, mientras que los regidores ganan 6 mil pesos.

Hace unos días, algunos elementos de la policía municipal renunciaron porque en la anterior administración cada policía ganaba 2 mil 800 pesos, pero ahora el regidor busca pagarles mil 600 pesos quincenales.

“Guillermo Sánchez, el regidor de la comisión de gobernación, pretende pagar sueldos muy bajos, como él tiene una fábrica de colchones y camas explota a sus trabajadores, les paga 800 pesos a la semana y trabajan más de nueve horas diarias. Quiere hacer lo mismo con los empleados del Ayuntamiento. Ya no lo aguantamos, la presidenta sólo escucha y calla, el que da las órdenes es su esposo”, indicó un municipal.

El pasado miércoles, un grupo de ciudadanos molestos por la falta de trabajo de los funcionarios encararon a la presidenta municipal y le dieron 100 días para que mejore su trabajo, de lo contrario le exigirán su renuncia.

Cabe recordar que en noviembre del 2015, el ex presidente municipal José Efraín García García fue acusado de un supuesto desvío de recursos públicos por más de un millón 400 mil pesos. Habitantes lo corrieron, quemaron sus vehículos y destrozaron su casa.

En febrero del 2016 quiso regresar pero los habitantes no se lo permitieron, desde entonces empezó a despachar en oficinas particulares en el municipio de Tepeaca. El 17 de abril del 2018 fue interceptado por un grupo de hombres que lo asesinaron.