El italo-mexicano Paolo Prato Paredes, desaparecido el miércoles pasado en el Mercado Unión, fue hallado embolsado en una barranca en los límites con Tlaxcala el pasado 20 de septiembre, pero fue hasta ayer que su madre confirmó la muerte del joven de 27 años.

La mamá de Paolo Prato reconoció a su hijo en las instalaciones del Servicio Médico Forense del estado de Tlaxcala; el pasado 19 de septiembre reportó la desaparición de Paolo, quien había venido a visitarla desde Italia.

En entrevista con El Sol de Puebla, la mamá de Paolo mencionó que antes de su desaparición acudió al Mercado Unión, ubicado en la colonia 20 de Noviembre, por pura ‘curiosidad’. “Me llama la atención ver la zona que está ahí detrás, regreso en 20 minutos”, mencionó a la madre.

A través de redes sociales se hizo viral la búsqueda del joven donde se describían sus rasgos físicos y la ropa que portaba la última vez que fue visto.

Fue hasta el día siguiente que un vecino del Barrio de Tenexac, del municipio de Papalotla, Tlaxcala, reportó un cuerpo envuelto en una cobija de colores y bolsa de plástico, que podría ser del joven italo-mexicano.

La Procuraduría General de Justicia del estado de Tlaxcala había informado a la madre del hoy occiso que hasta obtener resultados del cotejo que le habrían hecho con una prueba de ADN, no podrían confirmar que se tratase del cuerpo del desaparecido.

Sin embargo, aunque la espera siga latente, Martha Paredes, madre del joven italo-mexicano, confirmó que en efecto, el cadáver hallado el pasado 20 de septiembre en una barranca del municipio de Papalotla, Tlaxcala, con huellas de tortura y registrado en calidad de desconocido, pertenece a Paolo Prato.