Durante noviembre, primer mes completo de la gestión de Claudia Rivera Vivanco, la incidencia delictiva en la capital poblana registró una reducción del .6 por ciento, pero en cuestión de homicidios hubo un aumento de más del 50 por ciento, en comparación a octubre, mes de transición entre ella y el ex alcalde Luis Banck, según cifras del Secretariado Nacional de Seguridad Pública (SNSP).

La ‘ola de sangre’ que se vivió durante noviembre dejó 20 asesinatos en la capital poblana, 53.8 por ciento más que durante la transición con la administración de Banck Serrato, donde se registraron 13 carpetas de investigación por dicho delito.

El plan ‘Seguridad para Todos’, implementado por la secretaria de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (SSPTM), María de Lourdes Rosales, durante este mes en cuestión logró disminuir la incidencia delictiva en un 0.67 por ciento en comparación a septiembre, al pasar de dos mil 238 delitos denunciados a dos mil 223, es decir, 15 menos.

No obstante, se mantuvo un alza en los robos a vehículos, transportistas y el narcomenudeo mientras que el robo a transeúntes, transporte público, así como violaciones, extorsiones y secuestros fueron a la baja.

Noviembre, segundo mes con más asesinatos

La capital poblana se vio envuelta en una oleada de sangre, pues a partir del 22 de noviembre se desató una serie de ejecuciones en la Angelópolis, entre éstas los hechos en el Mercado Unión, los embolsados en la 20 de Noviembre y la Jorge Murad, los ejecutados en la Guadalupe Victoria y la Laguna de Chapulco, la universitaria asesinada durante un asalto en la colonia Tecnológico y los hermanos acribillados en San Miguel Canoa, sumaron al menos 15 víctimas de asesinatos en una semana.

De acuerdo con los datos del Secretariado Nacional de Seguridad Pública (SNSP), durante el primer mes de la administración morenista se integraron un total de 20 carpetas de investigación por homicidio doloso, siete más que durante el mes de octubre, cuando se integraron 13 expedientes, significando un incremento del 53.8 por ciento.

Estas 20 carpetas ubicaron al mes de noviembre en el segundo lugar con el mayor número de casos en lo que va del año, detrás de abril cuando se integraron 22 carpetas y empatado con mayo y julio. Cabe señalar que en lo que va del 2018 se han integrado un total de 173 carpetas por homicidio doloso en la capital poblana, un promedio de un asesinato cada 46 horas.

En cuanto a los casos de feminicidio, durante el mes de noviembre no se registró ni un solo caso, reduciendo en un 100 por ciento la incidencia de este delito en comparativa con octubre, cuando se registraron dos casos, lo que significó que el asesinato de la estudiante Karla Fernanda fue contabilizado como un homicidio doloso.

Disminuye la incidencia en menos de un por ciento

Mientras tanto, la incidencia delictiva general en la capital poblana logró disminuir en un 0.67 por ciento, al pasar de dos mil 238 delitos denunciados a dos mil 223; es decir, en noviembre se cometieron y denunciaron ante la Fiscalía General del Estado (FGE) 15 delitos menos que en octubre.

Los delitos que presentaron un mayor descenso en su incidencia fueron las extorsiones, que pasaron de siete casos a tres, lo que representó una disminución del 57 por ciento. En cuanto a los robos en general, estos cayeron en un 5.2 por ciento, lo que representaron 61 incidentes menos que en octubre, mes de la transición entre el gobierno panista y morenista.

Asimismo, el programa ‘Pasajero Seguro’ con acompañamientos de la Guardia Nacional dio frutos, ya que  se registraron ocho asaltos menos que el mes anterior, al pasar de 51 a 43 atracos a unidades del transporte público colectivo y privado. Mientras que los asaltos a transeúntes en vía pública disminuyeron en 14 casos.

Delitos ligados al crimen organizado, en aumento

En tanto, los delitos como el narcomenudeo, robo de vehículos y a transportistas continúan  en aumento, pues se han incrementado hasta en un 62.5 por ciento en comparación con el mes anterior.

Los robos a transportistas en carreteras de la capital fue el delito que más incrementó, pasando de ocho atracos a 13; mientras que el robo de vehículos pasó de 392 denuncias a 402, es decir 10 unidades más. Estos dos delitos han sido ligados a las bandas dedicadas al robo de combustible, ya sea para obtener unidades para transportar el combustible, o apropiarse de la mercancía de los transportistas.