Los transportistas de las rutas M-17, 50, 61, 61A, 54, 17, 18, 22, 2000, Perimetral, 68 y JBS, estos últimos conocidos como ‘Los Morados’, amenazaron al gobierno estatal con realizar un paro de actividades este día a fin de que la administración de Antonio Gali aumente la tarifa del transporte público, incluso amenazando a concesionarios con dañar sus unidades en caso de que no se sumen a la protesta.

Fuentes revelaron a CAMBIO que este lunes se llevó a cabo una reunión entre concesionarios de las 12 rutas, encabezados por Ariadna Galicia Cruz, así como el diputado local de Morena, Alejandro Carvajal, con Alberto Vivas Arroyo, subsecretario de Movilidad para exigirle que se incremente la tarifa del transporte.

Al no haber acuerdo, amenazaron con paralizar este día el transporte público en la capital poblana, por lo que a través de un chat de WhatsApp este grupo de transportistas se dedicaron a advertir a los líderes de las rutas que circulan por Puebla que si no se unían al paro y circulaban les romperían los vidrios a toda unidad que vieran pasar.

La intención del grupo de transportistas era negociar un aumento en el costo del pasaje, el cual ha mantenido los mismos precios desde hace ocho años, convirtiéndolo en el más barato de todo el país.

Sin embargo, no hubo una respuesta por parte de las autoridades y esto provocó que los concesionarios tomaran la decisión de suspender las actividades de sus rutas a fin de generar presión.

En su edición del 23 de noviembre, esta casa editorial informó que concesionarios de la ruta 1 y de Cuetzalan solicitaron un incremento a las tarifas, sin embargo, tampoco fueron escuchados por las autoridades.

El pasado mes de agosto, distintos grupos de transportistas solicitaron un aumento al costo del pasaje, generando propuestas entre los ocho y los 14 pesos, para continuar operando.

En aquella ocasión, la SIMT accedió a negociar con los transportistas, generando una propuesta de ocho pesos, sin embargo, esta fue desechada por parte de las autoridades para no afectar la economía de los usuarios.

La demanda de los concesionarios de subir la tarifa del pasaje radica en que los costos de los combustibles han aumentado considerablemente en los últimos años, complicando el costo de operaciones para los concesionarios.