Fue imposible aplicar los protocolos antilinchamientos en Tepexco debido a que era mucha la gente que se estaba manifestando en la plaza principal y había temor de las autoridades, señaló Porfirio Valentín, secretario general del Ayuntamiento de ese municipio.

En entrevista, el funcionario señaló que no hubo condiciones para que se entablara el diálogo con la población el día de la masacre del pasado miércoles 7 de agosto; el propio delegado de Gobernación estuvo presente y no pudo tampoco negociar con la turba.

“No se dieron las condiciones para entablar el diálogo y así poder evitar lo que sucedió (el linchamiento de siete personas)”, confesó secretario general del Ayuntamiento de Tepexco.

Porfirio Valentín agregó que sí hubo comunicación con el Gobierno del Estado, pero señaló que eran muchas personas enardecidas por el ‘levantón’ de un hombre y señaló que no escuchaban los argumentos de la autoridad.

“Estuvimos en total comunicación con la Secretaría General de Gobierno, con el secretario Manzanilla, independientemente de la conversación entre el Gobernador y la alcaldesa (Aniceta Peña Aguilar).  Tepexco es un municipio tranquilo, sólo que ese día todo se salió de control”, indicó el secretario general del Ayuntamiento.

Cabe señalar que algunas personas del lugar comentaron que un grupo de pobladores estaba ingiriendo bebidas embriagantes al momento de los linchamientos y ese fue uno de los motivos por el que fue imposible entablar el diálogo, pues sólo gritaban y exigían ‘justicia’ cuando en realidad había personas inocentes.

Hasta el momento no hay detenidos ni señalados como responsables del asesinato de siete personas. Se espera que conforme avancen las investigaciones de la Fiscalía General del Estado, puedan conseguir videos de los hechos y la misma población comience a revelar quiénes instigaron el linchamiento.