El negocio de la ‘bolardiza’ en el Ayuntamiento de Puebla continuará toda vez que el regidor con licencia, Eduardo Covian Carrizales —quien impulsó el proyecto—, será el nuevo encargado de despacho de la Secretaría de Movilidad tras la salida de la titular, Alejandra Rubio Acle, consumando así una nueva traición, ahora contra el denominado G7.

Lo anterior fue avalado por el Cabildo, donde por 17 vota  a favor y seis abstenciones, Covián Carrizal obtuvo una licencia por tiempo indefinido para dejar su puesto como regidor electo del gobierno municipal, lo cual causó controversia dentro del cuerpo edilicio, así como con sus homólogos del grupo denominado G7.

Durante la discusión, el regidor de Morena, Roberto Elí Esponda, exhortó a Covián Carrizales a no dejar su puesto como regidor para encargarse de la Semovi, ya que la dependencia presenta diversas irregularidades que no han sido aclaradas.

“Existe sospechosísimo, yo respeto a mi amigo Covián y se lo dije que no aceptara despedirse de la regiduría para sumarse a la Semovi como titular (…), hay muchas cosas que se suscitan de manera rara”, dijo.

Esto fue secundado por su homológo Edson Cortés Contreras, quien mencionó que estar al frente de la Semovi en estos momentos es una mala decisión ya que la ‘bolardiza’ no ha sido aceptada por la ciudadanía, siendo un tema controversial.

“Quedar como encargado de la Secretaría de Movilidad ante un tema complicado de bolardos y macetones y un proyecto que ha sido rechazado por varios sectores, no es adecuado en estos momentos”, mencionó.

Sin embargo, Cortés Contreras negó que Eduardo Covián haya traicionado al grupo G7, el cual perdió fuerza tras su salida, ya que Jorge Othón Chávez Palma, quien tomo su lugar, negó sumarse a dicho grupo de regidores al mencionar que respaldará a la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco.

Ante esta situación, la regidora del PRI Silvia Tanús Osorio exhortó al contralor municipal, José María Sánchez Carmona, a realizar una investigación sobre el costo de los contratos, los socios que intervinieron en la colocación de los bolardos y los estudios que se efectuaron ahorra que Covián Carrizales se encuentra frente a la Semovi.

Carrizales niega traición, asegura que transparentará el proyecto

En entrevista posterior a la sesión Ordinaria de Cabildo, Eduardo Covián Carrizales negó haberse vendido a cambio de ser el titular de la Secretaría de Movilidad, también haber traicionado a sus homólogos del G7, por lo que aseguró que su principal motivo de estar al frente de la Semovi permitirá transparentar el proyecto que avale la ‘bolardiza’.

“Esta es una decisión particular para estar enfrente de un tema que para mí es toral, es un tema de movilidad (…), entonces esta decisión es para darle un realce a esta dependencia no me vendí ni traicione a nadie”, argumentó.

El director editorial de CAMBIO, Arturo Rueda, en su columna Tiempos de Nigromante del 12 de febrero, dio a conocer que Eduardo Covián Carrizales  es uno de los beneficiados por la colocación de bolardos que costó 16 millones de pesos, aunque traicionó a Claudia Rivera para sumarse al G7 y ahora traiciona a dicho grupo de regidores para volver al equipo de la alcaldesa.