La presidenta de la Comisión de Salud en el Congreso del Estado, Cristina Tello Rosas, exigió a Karina Pérez Popoca dejar de frenar las obras de construcción del nuevo Hospital San Alejandro, indicando que los derechohabientes no han tenido una atención médica digna desde el terremoto del pasado 19 de septiembre de 2017.

En entrevista, la legisladora de Morena indicó que si bien es necesario que el nuevo Hospital San Alejandro cuente con un área de estacionamiento adecuada y una zona donde se puedan vender alimentos para evitar que se generen congestionamientos viales y caos en la zona por la instalación de ambulantes, Tello Rosas calificó como ‘incongruente’ la decisión de Pérez Popoca de frenar las obras.

Lo anterior, dijo, se debe a que la situación que se vive en el Hospital de La Margarita del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ya es insostenible, ya que este nosocomio ha tenido por más de un año que sobrellevar la carga de trabajo y los pacientes que eran atendidos en San Alejandro.

“Es importante que este hospital se reabra y pueda atender a la población, no se puede continuar con una sobrepoblación de pacientes en el Hospital de la Margarita en donde hay muchísimas carencias ya (…) sí suena un poco incongruente que la presidenta esté frenando este desarrollo, pero a su vez sí es adecuado lo que ella propone, el tema de los cajones y el comedor para evitar que se genere caos alrededor de este hospital”, dijo Tello Rosas. 

Desde septiembre de 2017 el Hospital San Alejandro dejó de funcionar, luego de que el edifico donde se albergaba este nosocomio desde 1976 fuera clausurado tras el terremoto del 19 de septiembre. Ante esto, se proyectó que dicho hospital del IMSS fuera reinstalado en el predio donde se iba a instalar CIMA.

Sin embargo, en los últimas semanas las obras para reubicar San Alejandro se han visto frenadas debido a que la edil de San Andrés Cholula no ha entregado los permisos a la constructora Sacyr, ya que ésta exige que el proyecto sea modificado para instalar 800 cajones de estacionamiento, así como un área de comedor ante la presión de los vecinos de la zona que no quieren ver afectado el espacio donde habitan.