La mañana de este lunes se registró una fuerte movilización policiaca en el Centro de Reinserción Social de Tecamachalco cuando se dio a conocer que escapó Martín Aquino Flores Ángelo, un peligroso delincuente y homicida originario de Palmarito Tochapan y quien es considerado el antecesor de Antonio Martínez Fuentes, alias ‘El Toñín’.

A las 7:00 de la mañana en el interior del Cereso se movilizó el personal al darse cuenta que durante el pase de lista de los internos Martín Aquino Flores Ángelo no estaba, por lo que empezaron a interrogar al resto de los internos. El cambio de turno de los custodios  se realiza todos los días a las 8:00 de la mañana, pero esta ocasión no se llevó a cabo.

Al filo de las 9:00 de la mañana  elementos de la Policía Municipal fueron informados del hecho e iniciaron un operativo de búsqueda en toda la ciudad y los principales accesos y salidas de la cabecera municipal. También se le rastreó en los techos de inmuebles aledaños al Cereso.  

Aproximadamente a las 11:00 de la mañana, la Secretaría de Seguridad Pública informó en redes sociales que Flores Ángelo había escapado y solicitaba la colaboración de la ciudadanía para dar con el paradero del prófugo.

“En apoyo a la autoridad municipal trabajamos en la localización de Martín Aquino Flores Ángelo, que esta mañana se evadió del Cereso de Tecamachalco. Iniciamos el proceso legal contra el directivo del penal y exhortamos a llamar al @911Puebla o 089 para denunciar su ubicación”, comunicó la secretaría.  

El personal del Centro de Ceresos ingresó al penal, se hizo cargo de la seguridad de las instalaciones  e inició  las investigaciones en contra del director y custodios en turno.

Versiones extraoficiales indicaron que durante la madrugada Flores Ángelo quitó algunas láminas de un techo del patio del penal para escapar sorteando una  barda y varias azoteas,  burlando  a los custodios y a elementos de la Policía Municipal apostados en  la comandancia, instalada en el mismo inmueble del Cereso.  

La versión no fue aceptada por las autoridades, toda vez que era imposible que Martín Aquino Flores Ángelo, por su edad y complexión robusta, brincara una barda de más de 10 metros de altura sin ser advertido por el personal de seguridad, por lo que se investiga si escapó por la puerta principal del Cereso con la ayuda de custodios.

Horas después se supo que el director del Cereso, José Arturo Torres Pérez, y los custodios en turno  ya se encontraban  en la Fiscalía General del Estado (FGE), rindiendo su declaración.