Jueves, 25 de Abril del 2024
Indicador Político

Por más reuniones privadas, acuerdos formales, sonrisas, abrazos y hasta desplegados que realicen, el gran adversario del populismo lopezobradorista es el empresariado; y la guerra apenas está comenzando. Lo que se va a definir es el poder del Estado sobre las clases.

La segunda gran derrota política en el proceso electoral 2018 la padeció la prensa nacional: la narrativa analítica, demoscópica y de posicionamiento de parámetros ideológicos la impuso la prensa extranjera. Pero con un error de interpretación: esa prensa extranjera quiere vender la idea de que en México triunfó la izquierda; pero no, López Obrador y Morena no son de izquierda.

Después de muchos conflictos y épocas de oro, el PRI ha llegado a su lucha final: quedar en manos de la élite que lo rescató en el 2006, lo llevó a la victoria en el 2012 y lo hundió a un nivel peor que el de 2006, o pasar a una militancia que tendría que construir otro partido para terminar con el caudillismo sexenal.

1.- Las posibilidades de la Presidencia de Andrés Manuel López Obrador dependen de su habilidad para administrar en Morena sus nuevas bases ‘licuadas’ de todos los grupos y personas que ya no encontraron en el sistema político priista lo necesario para sus ambiciones personales.

1.- Ayer domingo primero de julio de 2018 finalmente murió el sistema político priista. Lo malo radica en el hecho de la ausencia de un partido-sistema de relevo porque Morena no es en rigor un partido político, sino una ‘babel’ de intereses individualistas de sus militantes incorporados sin filtros.

1.- Después de 35 años de neoliberalismo con tasa promedio de PIB de 2.2 por ciento, corrupción escandalosa asociada a la complicidad gobierno-empresarios, 78 por ciento de mexicanos con una a cinco carencias, millones de personas en la informalidad y un Estado al servicio de la plutocracia, México se enfila a un neopopulismo más priista que sudamericano.

1.- El día en que Yeidckol Polevnsky, presidenta de Morena, afirmó categóricamente que sólo un fraude le quitaría la victoria a López Obrador y que se les aparecería el diablo, a su lado estaba un personaje de todos conocido: el ex priista, pospetista y neomorenista Manuel Bartlett Díaz, secretario de Gobernación y presidente de la Comisión Federal Electoral en las elecciones de 1988 cuando el sistema “se cayó” para detener el flujo de votos a favor de Cuauhtémoc Cárdenas. A Cárdenas sólo el fraude oficial, institucional gubernamental de Miguel de la Madrid le quitó la presidencia.

El escenario político electoral la semana previa a las elecciones será una tensión entre la realidad y las encuestas:

La pieza clave del sistema político priista no fue el presidente de la República sino el PRI. El partido fue el sistema político: la ‘caja negra’ explicada por el teórico David Easton, en cuyo seno se realizaban las interacciones entre agentes políticos y el presidente distribuía verticalmente valores y beneficios.

Uno de los enigmas políticos que debe resolver Andrés Manuel López Obrador antes de comenzar a gobernar será explicar las razones para poner en un mismo espacio legislativo a la activista antisistémica Nestora Salgado y al radical conservador Germán Martínez Cázares: o jala a la primera a la institucionalidad para desactivarla o empuja al segundo a la revolución social anarquista de los pobres.

1.- Rumbo a la última media semana de campaña y media semana de vacío electoral para meditar el voto, candidatos y tendencias siguen atados de-ses-pe-ra-da-men-te a las decenas de encuestas que sólo unifican ventaja para López Obrador. Sólo con dato analítico: en junio del 2006, Calderón iba abajo de López Obrador y ganó y en el 2012 el tabasqueño estaba a 13 puntos de Peña y perdió por 6 puntos.

Todas las razones para criticar al gobierno de Donald Trump son ciertas y censurables desde todos los puntos de vista. Sin embargo, la culpa originaria es de los países y gobiernos que han sido incapaces de dar bienestar y seguridad a sus ciudadanos y que los ha obligado a cruzar la frontera de los EE. UU. de manera ilegal en busca de mejores salarios.

El caso de la senadora Layda Sansores de San Román ilustra la falsedad del discurso anticorrupción del candidato López Obrador: los dineros ocultos pagados por el Senado para gasto personal hubieran sido un escándalo de antología si fuera priista. Pero en Morena, ahora se sabe, se perdona toda corrupción pasada, presente y por tanto futura.

OAXACA, Oax. El cierre de campaña presidencial de Morena en Oaxaca el sábado 16 de junio mostró el modelo político y de gobierno 2018-2024 del candidato Andrés Manuel López Obrador en tres tiempos:

Al perfilarse el proceso electoral del 2018, los tres partidos grandes construyeron alianzas con partidos pequeños en busca del copetito que les diera ventaja ante el empate técnico que se perfilaba. Sólo que ahora se sabe que varios de esos partidos chicos son unas rémoras que buscan ventajas sin aportar votos.

Si la propuesta de Ricardo Anaya con la alianza PAN-PRD no logra pasar el retén de la alianza PRI-PGR-Pinos, entonces el panredismo tendrá en el Senado su única posibilidad de evitar que López Obrador restaure el ancien régime priista y configurar la transición del régimen autoritario priista y pronto priista-morenista a un nuevo equilibrio opositor con cambio de régimen y gobierno de coalición.