Por sexta ocasión en apenas poco más de dos meses, el gobernador Antonio Gali Fayad dejó en ridículo a los diputados de Juntos Haremos Historia al realizar observaciones y vetar la reforma realizada por los ‘barbosistas’ a la Ley de Rendición de Cuentas y Fiscalización Superior con la que, de manera mañosa, pretendían disminuir el presupuesto para 2019 a la Auditoría Superior del Estado (ASE), por capricho y para concretar la vendetta personal de José Juan Espinosa Torres contra el órgano fiscalizador. 

El último veto constitucional ejercido por el titular del Ejecutivo en contra de las reformas se da a la modificación realizada el pasado 5 de noviembre a la fracción primera del artículo 129 de la Ley de Rendición de Cuentas del Estado, en la que estipula la prohibición para que la ASE no opere con una menor cantidad de recursos a la ejercida en el año fiscal previo.

Por ello, las observaciones realizadas por el gobernador se dan debido a que, además de eliminar el ‘candado’ para disminuir el presupuesto de la ASE, los diputados de Juntos Haremos Historia aprobaron un presupuesto para el órgano fiscalizador para el ejercicio 2019 de 140 millones, pese a que para 2018 se le otorgó una bolsa de recursos de 154 millones. 

Además, debido a que antes de aprobar la modificación del artículo 129 de la Ley de Rendición de Cuentas de la Entidad los diputados ‘barbosistas’ avalaron el presupuesto para 2019 para el Poder Legislativo, donde se aplicó el recorte presupuestal por 14 millones de pesos para la ASE, por lo que el gobernador aplicó su facultad para realizar observaciones a la reforma aprobada por los diputados de Juntos Haremos Historia. 

Fue el presidente de la Mesa Directiva del Congreso local, José Juan Espinosa Torres, quien dio a conocer que el pasado 20 de noviembre el gobernador Antonio Gali envió las observaciones a la propuesta ‘barbosista’ para modificar el artículo 129 de la Ley de Rendición de Cuentas. 

Los vetos del gobernador 

Previo al veto que aplicó Gali Fayad a la reforma para reducir el presupuesto para 2019 destinado a la ASE, el Ejecutivo ha aplicado en seis ocasiones el veto constitucional en contra de las modificaciones a ley realizadas por los ‘barbosistas’. 

La primera de ellas fue a la abrogación de la ‘Ley Bala’ aprobada el 17 de septiembre y observada por el gobernador debido a la falta de un marco jurídico que regule el uso de la fuerza pública. 

Seguido del veto hecho a la modificación a la Ley de la Fiscalía General del Estado, con la que buscaban destituir al encargado de despacho de la FGE, Gilberto Higuera Bernal y con la que los ‘barbosistas’ pretendían violar el principio de retroactividad, sin embargo, los diputados de Juntos Haremos Historia recurrieron a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para promover una acción de constitucionalidad. 

El tercer veto aplicado por el titular del Ejecutivo fue en contra de la reforma al artículo 52 de la Ley Orgánica Municipal, con la que los legisladores de Morena y sus aliados querían eliminar al Congreso la facultad de intervenir ante la posibilidad de que en los cabildos no existieran condiciones para designar a un presidente municipal sustituto. 

Los últimos dos vetos aplicados por el gobernador fueron realizados el pasado 15 de noviembre en contra de la reforma a la Ley de Medio Ambiente para prohibir la instalación   de anuncios espectaculares en áreas verdes y a la reforma a la Ley de Seguridad con la que los ‘barbosistas’ pretendían suplir la ‘Ley Bala’.