Un presunto atentado nocturno en contra del candidato del frente opositor, Eduardo Rivera Pérez, ocurrido en el fraccionamiento en la zona de Zavaleta donde vive desde hace más de una década, sacudió la carrera a la gubernatura, dejando un alud de enigmas que deberán ser resueltos por la Fiscalía General del Estado y la Secretaria de Seguridad Ciudadana, que habría detenido a dos de los involucrados, pero en un lugar diferente a donde ocurrieron los hechos.
Rivera Pérez alertó una intrusión con objetivos políticos desde su cuenta en X y suspendió su gira en el interior del estado, pues se encontraba en el municipio de Tlatlauquitepec. En ese momento, comenzaron las especulaciones, pero también la llegada de peritos y agentes del MP a su domicilio en la calle Cañada de la colonia Santa Cruz Buenavista.
La reconstrucción de los hechos refiere, sin establecer cómo, un grupo de hombres se introdujo en el fraccionamiento e ingresó a una vivienda contigua donde se encontraba un grupo de mujeres: mamá e hijas. A pregunta expresa si se trataba del domicilio del “político”, ellas callaron, a lo que los delincuentes afirmaron que lo iban a esperar para darle “un plomazo en la cabeza”.
Así comenzó la agresión que derivó en un traumatismo craneoencefálico y diversas lesiones.
Tampoco quedó claro cómo ocurrió la salida de los maleantes y qué pasó con el personal vigilancia del residencial. La agresión inmediatamente fue reportada y elementos de la SSC iniciaron la búsqueda de los atacantes a través del sistema de videovigilancia.
Sin precisar la hora, elementos de la policía municipal detuvieron a una pareja a bordo de una camioneta Jeep Patriot en una gasolinera junto al centro comercial Solesta en la avenida Atlixcáyotl. Una de las detenidas en apariencia es de nacionalidad colombiana y el otro originario de la CDMX, pero no trascendieron sus nombres, aunque ambos fueron puestos a disposición de la Fiscalía General del Estado.
Respecto de las vecinas de Eduardo Rivera, fotografías obtenidas por DIARIO CAMBIO evidencian que por lo menos una de ellas fue internada en el Hospital Ángeles, pero sí rindió su declaración y denuncia, por lo que ayer el fiscal Gilberto Higuera Bernal reconoció que los hechos se investigaban por los delitos de allanamiento, robo y lesiones, sin descartar aun el móvil político.
Eduardo Rivera Pérez, a su vez, sostuvo que se trató de atentado directo en su contra, que “no aceptaba otra interpretación” y en su cuenta de X anunció la presentación de la denuncia correspondiente.
El atentado nocturno
La irrupción ocurrió a las 21:22 horas del sábado 4 de mayo en un fraccionamiento ubicado en Santa Cruz Buenavista, en las inmediaciones de Calzada Zavaleta, en donde vive el candidato de la oposición.
De manera oficial se informó que al menos siete personas preguntaron por Eduardo Rivera, quien no se encontraba en su hogar y realizaba una gira de promoción al voto en los municipios de Yaonahuac y Tlatlauquitepec.
“Iban en busca del candidato, se equivocaron de casa”, puntualizó el alcalde Adán Domínguez.
Para ingresar al fraccionamiento, los delincuentes sometieron a los vigilantes del residencial, ubicado en la calle Cañada de la colonia Santa Cruz.
Según los vecinos, se escucharon detonaciones de arma de fuego y hasta los golpes; y por temor, buscaron un refugio seguro en su propio hogar.
Mientras, las vecinas de Eduardo Rivera, una madre y sus hijas eran agredidas físicamente en el momento que les preguntaban por el paradero del panista para “recibirlo de un plomazo” en la cabeza.
“Al llegar los agresores preguntaron directamente por mí, y que luego en repetidas ocasiones por el político, y dijeron que ‘cuando llegue lo recibiremos con un plomazo en la cabeza’”.
Esta información y la manera en cómo se dieron los hechos es una muestra evidente de que se trató de un atentado directamente contra mi persona, acusó Rivera. “No puede haber, ni admito otra interpretación”, sentenció Rivera.
Actuamos como primeros respondientes: Adán Domínguez
Por su parte, el presidente municipal de Puebla, Adán Domínguez sentenció que actuaron como “primeros respondientes y detuvieron a dos personas”.
La detención se realizó la misma noche del sábado por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
Los detenidos son un hombre y una mujer, quienes viajaban a bordo de una camioneta Jeep Patriot color blanco. El resto de los implicados lograron huir.
De manera preliminar, el fiscal general de Puebla, Gilberto Higuera Bernal, dijo que la primera línea de investigación sobre el caso es el robo a casa habitación, allanamiento de morada y lesiones a las vecinas de Eduardo Rivera.
También dijo que es muy pronto señalar que detrás de los hechos violentos existan motivaciones políticas.
Sobre las víctimas, DIARIO CAMBIO informó que la más grave resultó con traumatismo craneoencefálico, fractura de hueso y lesiones en la espalda así como las costillas.
Presenta Eduardo Rivera su denuncia formal en Fiscalía
Este 5 de mayo, Eduardo Rivera Pérez denunció formalmente ante la Fiscalía General del Estado (FGE) el presunto atentado dirigido en su contra que se registró la noche del sábado en el fraccionamiento en el que se ubica su domicilio.
“He presentado ante la Fiscalía General del Estado de Puebla la denuncia correspondiente, contra quien resulte responsable, por el atentado en mi contra ayer en la noche. Como informé por la mañana, estos hechos inaceptables dejaron a mis vecinas con lesiones físicas importantes, además de daños emocionales a ellas y a mi familia”, escribió Rivera Pérez.
En su mensaje, el aspirante a la gubernatura aseguró que tras este atentado que afirma, iba dirigido hacia él, decidió recurrir a las autoridades para que estos hechos puedan ser esclarecidos de forma “incontrovertible”.
Únete a nuestro canal de WhatsApp para mantenerte informado al estilo de CAMBIO
