Se manifiestan vs "El Gavilán"

—Crónica—

Exigen habitantes de Izúcar de Matamoros que se convoque a nuevas elecciones tras la detención de su edil, Rubén Gil Campos, en Estados Unidos por haber introducido droga a ese país

Efraín Núñez Calderón Izúcar de Matamoros/ enviado

Las más de 600 personas reunidas en el zócalo de Izúcar de Matamoros gritaron al unísono: “queremos nuevas elecciones”. Entre las consignas de descontento, un indigente fingía sostener un rifle entre sus brazos y disparaba al aire mientras reía a carcajadas, luego corría y se sentaba en la escalinata de un callejón a un costado de la plaza.

A la reunión convocada por el PRD el viernes pasado asistieron militantes de todos los partidos, pero en su mayoría personas de la sociedad civil, quienes expresaron su repudio en contra de Gil Campos y el Gobierno marinista.

En pleno discurso de Manuel Madero, ex candidato a esta alcaldía por el PRD, los manifestantes sacaron un cubo de cartón con la forma de una jaula. En su interior se observaba la caricatura de un gavilán con los ojos saltones: “ya cayó el Gavilán”, “El Gavilán tras las rejas”, espetó un grupo de ciudadanos, secundados por aplausos y gritos de los asistentes “fuera”, “que no vuelva”.

El ex aspirante mostró la carta que 15 organizaciones de migrantes en Estados Unidos mandaron al presidente Felipe Calderón, en la que exigen la celebración de un nuevo proceso electoral y la destitución de Rubén Gil. Asimismo, reprochan a las autoridades que los poblanos sean conocidos como los “narcopreciosos”.

Durante el discurso de Melitón Lozano, diputado local del PRD, un ciudadano de avanzada edad mostró su apoyo a favor del narcoalcalde, asegurando que el edil con licencia llevó beneficios a Izúcar. De inmediato vino la reacción de los asistentes quienes lo abuchearon y lo corrieron a mentadas de madre. El hombre salió cómo pudo de la manifestación, en medio de patadas y coscorrones.

Lozano llamó a la calma: “no caigamos en provocaciones”, “nuestra protesta es pacífica”. Luego convocó a pensar en las posibilidades para nombrar a un nuevo presidente. Mientras tanto, la gente mostró su descontento por el posible arribo del alcalde suplente, pues es cuñado de Rubén Gil: “queremos nuevas elecciones”, volvieron a expresar los quejosos en el crepúsculo de aquel caluroso día.

Tras evidenciar la serie de irregularidades y compra de votos cometidas por “El Gavilán”, Manuel Madero, ex candidato perredista se descartó para buscar la alcaldía izucareña: “ya no quiero ser presidente, mi tiempo y mi ciclo ya terminaron, hablo como un ciudadano más que no quiere que Izúcar sea gobernado por un delincuente”.

“Vamos a balear sus casas”

El repudio contra Gil Campos se combinaba con un ambiente tenso por la presencia del narco en la zona. Los mensajes cifrados y particularmente violentos del crimen organizado comenzaron a llegar en contra de los asistentes a la marcha.

Un grupo de manifestantes denunció a Cambio que la gente de Rubén Gil mandó el mensaje en el sentido que se ubicarán a los asistentes a la protesta para después “balearlos en sus casas”. A pesar de la amenaza, los asistentes, en su mayoría campesinos, hicieron acto de presencia:

“No queremos narcotraficantes. La gente de Rubén Gil ha amenazado a los presidentes auxiliares de que las obras pactadas dependen de la permanencia de este grupo en el ayuntamiento. También andan diciendo que a quienes sean observados repartiendo volantes o en el mitin los mandará a tirotear”, aseguró una señora que asistió a la protesta:

—¿No tienen miedo de estas amenazas?— se le preguntó a la asistente y sus acompañantes.
—Más que miedo, tenemos coraje de que nos hayan querido imponer a un desconocido, a un narcotraficante.

Olamendi pidió el voto
a favor de su socio

Mejor conocido como el doctor Madero, el ex aspirante perredista denunció la presencia de Carlos Olamendi, alto comisionado del Migrante en el pasado proceso electoral para pedir el voto, casa por casa, a favor de su socio Rubén Gil Campos.

Según Madero, quien también hizo acto de presencia en los mítines del narcoalcalde fue Jorge Estefan Chidiac, diputado federal priista, quien hace unos días intentó deslindarse de Gil Campos.

Asimismo, refiere que tan solo en la jornada electoral, Gil Campos gastó más de 2 millones de pesos para operar la compra de votos, de credenciales y de conciencias, así como las dádivas para que los izucareños votaran a su favor.

No es todo, Madero manifestó que Gil Campos tuvo el poder de propiciar que tanto la Policía Estatal, como elementos de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) y la PGR, frustraran el operativo del PRD para contrarrestar el mapacheo del entonces candidato priista:

“Montamos un operativo caza mapaches. La policía estatal, la AFI y la PGR perseguían nuestras unidades. En lugar de que los órganos de seguridad sirvieran para resguardar el orden estaban en nuestra contra (…) Carlos Olamendi hizo acto de presencia muchas veces a pesar de que tenía prohibido hacer proselitismo por ser funcionario. Tenemos fotos, las mostramos a la prensa de cuando estaba casa por casa con el candidato apoyándolo para pedir el voto.”

Por su parte el diputado Melitón Lozano advirtió que en caso de que no se respete la voluntad ciudadana en Izúcar de convocar a nuevas elecciones, habrá inestabilidad social en dicho municipio. El ex presidente municipal aseguró que insistirá en el punto de acuerdo presentado ante el pleno: “Si la gente dice que quede la gente del mismo ayuntamiento, que se respete.

Pero si dice que se revoque el mandato y se convoque a nuevas elecciones, eso sería lo que tendría que llevarse a cabo. Ojalá exista voluntad política del Congreso para hacer caso a los consensos ciudadanos porque está en riesgo la estabilidad social. Si se intenta imponer a un alcalde habrá problemas de legitimidad.”